Desarrollo de las Soft Skills

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Hoy, las habilidades técnicas o duras son necesarias para generar una buena impresión en las entrevistas de trabajo; sin embargo, conseguir un empleo no es lo más difícil. El verdadero trabajo inicia cuando lo obtienes, en este sentido, las habilidades blandas o interpersonales son prioritarias para conservarlo

Rubén Onorio

El término soft skills se utiliza en el área de la psicología organizacional para referirse a las habilidades sociales o blandas que ostenta una persona, es decir, los rasgos que caracterizan su personalidad como: comunicación asertiva, lenguaje incluyente, inteligencia emocional, hábitos personales, optimismo, sentido común y actitud reflexiva. Éstas se complementan con las hard skills o habilidades duras, las cuales hacen alusión a las particularidades profesionales y laborales que hacen de la persona un buen colega con el equipo de trabajo, así como con los clientes y posibles prospectos.

Alguna vez habrás escuchado “nos contratan por aptitudes, nos despiden por actitudes”, una frase que da mucho a reflexionar. Lo más sencillo de evaluar es lo que realmente puedes medir. Por ejemplo, el nivel de conocimiento o aptitud para realizar alguna actividad en especial, así como los resultados obtenidos en ventas o la eficiencia en tiempos de logística. Todos estos aspectos han permitido que las habilidades duras sean de fácil medición, ya que su característica principal es darnos información en datos cuantitativos o cualitativos, lo cual permite medirlas, mientras que las habilidades blandas son más complejas para ser determinadas por indicadores.

Siempre ha sido más fácil establecer quién es bueno para cumplir la cuota de ventas o realizar un cálculo, ya que estos aspectos suelen ser más notorios por la inmediatez con que se muestran; sin embargo, resulta más complejo determinar quién es mejor para los niveles de adaptación al cambio, tolerancia y manejo emocional, negociación y solución de conflictos, etcétera. Esto se debe a que las cualidades antes mencionadas requieren de un tiempo más prolongado para causar un impacto entre los directivos. Una vez que lo has logrado, debes continuar mejorando para superarte a ti mismo, día con día.

La postura empresarial en cualquier compañía es contar con gente verdaderamente competente, por lo que las personas deben ser capaces de relacionarse en sus entornos y participar proactivamente, ya sea con clientes internos o externos.

Tomando en cuenta todo lo anterior, es básico integrar las habilidades duras con las habilidades blandas, con la finalidad de que ante determinadas situaciones cuentes con el conocimiento, pero también estés capacitado para resolver problemas, e incluso convertirte en un experto mediador para la solución de conflictos.

Está comprobado que si una persona se considera capaz de alcanzar el éxito en sus gestiones individuales y comunitarias, en los ámbitos laborales, sociales y familiares, indudablemente será un colaborador altamente productivo y satisfecho de pertenecer a esa empresa.

En alguna ocasión, Marcel Robles, investigador de la Universidad de East Kentucky ubicada en Estados Unidos, entrevistó a 182 ejecutivos para averiguar cuáles eran los soft skills más relevantes para ellos. Según su estudio, estas 10 son las más importantes:

  1. Comunicación: habilidades orales, escritas y para escuchar
  2. Cortesía: hacer solicitudes de manera respetuosa y diciendo “por favor” y “gracias”
  3. Flexibilidad: capacidad de adaptación, voluntad de cambio, es decir, ajustarse a los transformaciones y ser receptivo a las enseñanzas
  4. Integridad: honestidad, ética y moral. Tener valores personales y hacer lo que es correcto
  5. Habilidades interpersonales: ser cordial, agradable, tener sentido del humor, empatía, autocontrol, paciencia, sociabilidad y calidez
  6. Actitud positiva: ser optimista, entusiasta, alentador, feliz y tener autoconfianza
  7. Profesionalismo: tener una apariencia apropiada y equilibrada, para lo cual es importante vestir formal y/o de manera adecuada al entorno
  8. Responsabilidad: ser confiable, comprometido, meticuloso e ingenioso. Tener autodisciplina y sentido común para hacer bien el trabajo
  9. Trabajo en equipo: ser cooperativo y convivir de manera armoniosa con otros. Ser afable, comprensivo, servicial y colaborador
  10. Ética del trabajo: ser solícito, leal, con iniciativa y motivación, además de tener puntualidad y asistencia constante

No es raro ver que aún en muchas organizaciones se piensa que las habilidades técnicas son las más importantes y pierden la visión de futuro y las posibilidades de un éxito mayor. No obstante, un individuo que tiene desarrolladas sus habilidades duras al máximo, pero que no es capaz de integrarse, comunicarse adecuadamente con otros, tomar la iniciativa, poseer liderazgo y asertividad de involucrarse dentro de un núcleo o sociedad, difícilmente alcanzará el éxito en sus propósitos. Esto llevará a que la persona en cuestión se convierta en un colaborador semifrustrado, sentimiento que se reflejará en la manera de ofrecer servicios a los clientes, quienes son seres humanos que toman decisiones de compra para satisfacer una necesidad, pero que podrían dejar de frecuentar a la empresa por causa de una mala atención y servicio.

Cabe destacar que las compras suelen estar influidas por una emoción, por lo tanto se debe determinar qué emociones generamos en nuestros prospectos y clientes actuales, para que decidan elegirnos a nosotros. Esta pregunta es de vital importancia para contribuir a la permanencia de tu marca en la mente de tus consumidores y en el mercado. De tal forma que reconocer e invertir en desarrollar las habilidades blandas de los colaboradores representará siempre un gran negocio.

 

Rubén Onorio. Licenciado en Ciencias Políticas y director general de ONESSO Capacitación y Desarrollo Empresarial. Especialista en capacitación empresarial y desarrollo humano, inició en la Organización de Negocios Internacionales en 2006, en la que reafirmó la trascendencia que la capacitación tiene para las personas y empresas, tanto a nivel privado como masivo.